SQER: Capítulo 17

 

Capítulo 17: ¡Noticias impactantes! ¡Después de hacer esto, aquello y llorar, Zhao Qing Yuan no pudo levantase de la cama!

Ese día, cuando Zhao Qing Yuan cerró la puerta de golpe y se fue, pensó que Yu Qing Huan lo perseguiría para disculparse y así poder fingir estar enojado con este último, y luego hacer las paces con él.

¡Este era el proceso normal después de una pelea entre buenos amigos!

Sin embargo, lo que nunca había esperado era que Yu Qing Huan fuera una persona que no jugaba de acuerdo con el sentido común.

Zhao Qing Yuan entendía que Yu Qing Huan era joven y tenía una fuerte autoestima, por lo que podía perdonar la ausencia de Yu el primer día, pero este último no apareció tampoco durante el segundo día.

¡No solo no vino, sino que también siguió a otros sin siquiera informarle!

—¡Por el amor de Dios! —Mirando a Zhao Qing Yuan, que estaba expeliendo ira por todas partes, como si estuviera poseído por un dios asesino, su mánager le dio una sonrisa irónica. Amasó el hombro de Zhao y trató de persuadirlo—: Eres diez años mayor que Qing Huan. ¿Qué tipo de disputas tienes con él? ¿No se trata solo de una disculpa?

Incluso su mánager no podía tolerar que perdiera los estribos como una niña.

Sin embargo, tan pronto como el mánager mencionó esto, la ira de Zhao Qing Yuan surgió de inmediato—. ¡Te lo digo! ¡De ahora en adelante, Yu Qing Huan está fuera de mi lista! ¡Hemos terminado!

Entonces Zhao Qing Yuan lo pensó por un momento y se sintió un poco confuso sobre su ruptura unilateral.

Luego sacó su teléfono celular y envió un Weibo.

[Zhao Qing Yuan: Amistad terminada [Adiós] @Yu Qing Huan]

Después de publicarlo, Zhao Qing Yuan no se rindió, sino que miró la pantalla en busca de los comentarios de sus fanáticos.

Dado que sus fans lo amaban tanto, al escuchar que su ídolo terminó su amistad con Yu Qing Huan, lo defenderían incondicionalmente y luego condenarían a Yu Qing Huan juntos, pensó Zhao Qing Yuan.

Bueno, los hechos habían demostrado que obviamente pensaba demasiado.

La cantidad de nuevos mensajes aumentó a una velocidad visible a simple vista. Zhao Qing Yuan se sintió estúpido en un instante cuando hizo clic en estos comentarios.

¿No habían accedido sus fans a compartir el bien y el mal con su ídolo? Todos comentaban como si estuviera contando chistes.

[yoyoyoyo ~: Nuestro Yuan está tímido de nuevo, tsk, tsk.]

[yoyoyoyo ~: ¿Por qué siempre llamas a @Qing Huan por Weibo? ¿No están en el mismo set? ¡Actuaste como una joven gruñona! ¡Chicos, mantengan el rango!]

[yoyoyoyo ~: No puedo evitar mirar la hora en la esquina inferior derecha de la pantalla. ¿Debes decir esto temprano en la mañana? Por cierto, ¿qué tipo de posición de sexo es “tener una ruptura”?]

[yoyoyoyo ~: Lo siento por nuestro Yuan, fue abandonado por Qing Huan solo por su imagen pública reticente e indiferente.]

—...

Liu Jia An había publicado las primeras fotos de “La línea entre la vida y la muerte” esta mañana. Todos los internautas sabían que Zhao y Yu estaban en el mismo elenco, por lo que se sintieron libres de burlarse de ellos dos.

Zhao Qing Yuan era un hombre recto como el acero, solo navegaba por Internet en busca de fotos de mujeres hermosas, y nunca había explorado campos como de los que hablaban sus fanáticos, por lo que simplemente tiró su teléfono y decidió dejar Internet por un día.

Y, Yu Qing Huan, a quien maldijo amargamente, siguió a Wang Zhen Sheng al Gran Teatro Popular de la Capital.

En el escenario, los actores estaban ensayando la obra de teatro Su Dongpo, en la que resultó ser la escena de socorro en el caso de desastre de Su Dongpo en Hangzhou.

El actor que interpretaba a Su Dongpo llevaba una túnica suelta azul y blanco. Ardiendo de ira en sus ojos, denunció la inacción de los oficiales subordinados.

En comparación con las obras de televisión y las películas normales, las obras de teatro eran más exageradas. Las emociones de los actores eran más externas y los movimientos también eran más vigorosos. Acompañada de música triste y el efecto amplificador del escenario, la actuación sería muy contagiosa.

—Así que —Wang Zhen Sheng miró a Yu Qing Huan con una sonrisa—, ¿cómo te sientes?

—No puedo hacerlo —suspiró Yu Qing Huan. Su corazón ligeramente impetuoso finalmente se había calmado desde su renacimiento.

No era fácil ser capaz de actuar en una obra de teatro. Las acciones, expresiones e incluso voces de los actores debían ser consistentes. Si no eran capaces de integrarse completamente en el rol, el desempeño sería desastroso.

No solo eso, en el escenario vacío, la calidad psicológica de los actores debía ser fuerte, de lo contrario no podrían ser capaces de apoyar un escenario tan grande con su actuación en absoluto.

Wang Zhen Sheng negó con la cabeza—. Nunca sabrás si puedes hacerlo si no lo intentas.

Yu Qing Huan parecía inteligente—. Quiere decir...

Wang Zhen Sheng caminó delante del escenario, agarró a la persona a cargo y dijo algunas palabras. Este último inmediatamente mostró una expresión respetuosa en su rostro, levantó la mano para suspender la actuación en el escenario, le entregó un guion a Yu Qing Huan y le dijo con una sonrisa—: Sube y pruébalo. Esta es la primera vez que el señor Wang trae a alguien aquí.

Yu Qing Huan le dio las gracias, echó un vistazo rápido a las primeras páginas del guion, respiró hondo y subió al escenario.

Estar de pie en el escenario era totalmente diferente a sentarse en los asientos de abajo. Aunque Yu Qing Huan no sufría de pánico escénico, todavía no estaba tan cómodo como cuando estaba en el set.

Primero simuló la escena en su mente y leyó las líneas de acuerdo con el guion.

Cuando estaba filmando, nunca sintió que era pobre en actuando. Sin embargo, esta vez, de repente se dio cuenta de sus defectos.

No solo su actuación era inmadura, sino que su impulso era insuficiente.

Hablaba con su propia voz, y si subía un poco el volumen, no solo se le quebraría la voz, sino que también sentiría dolores de garganta. Aunque no estaba dispuesto a admitirlo, Yu Qing Huan sabía en su corazón que su actuación simplemente no era lo suficientemente buena.

Una vez había estado satisfecho por haber ganado muchos premios y sintió que ya no necesitaba mejorar sus habilidades de actuación.

—Profesor Wang —Después de una breve actuación, Yu Qing Huan estaba un poco sin aliento. Salió del escenario y caminó junto a Wang Zhen Sheng con los ojos brillantes—, muchas gracias.

Wang Zhen Sheng descubrió que, aunque el chico se dio cuenta de sus defectos, no estaba triste ni perdido. En cambio, todo su cuerpo estaba lleno de una energía sin precedentes. El anciano le dio una palmada en el hombro con alivio—. Buen chico.

Este chico había estado a la altura de su reconocimiento.

Cuando Yu Qing Huan salió del Gran Teatro, estaba solo con una cámara de Wang Zhen Sheng en la mano. El predecesor le pidió que filmara su práctica diaria y luego que revisara las grabaciones para encontrar sus propias deficiencias en su actuación.

Wang Zhen Sheng también sugirió que buscara un profesor de música vocal para practicar su vocalización, lo que le daría una ventaja para capturar su sonido original durante la filmación.

Al mirar la cámara que tenía en la mano, Yu Qing Huan suspiró con una expresión compleja.

Obviamente, no había planeado ingresar al círculo de entretenimiento nuevamente después de su renacimiento, pero sucedió que las cosas no estaban bajo su control, como si todos lo empujaran hacia adelante. Como perfeccionista, no podía soportar el desorden.

Incluso si pudiera dejar de ser actor en el futuro, todavía quería mejorar sus habilidades de actuación tanto como fuera posible durante el período del contrato, lo que lo llevaba a seguir cultivándose en el círculo del entretenimiento y a tener dificultades para retirarse incluso si estaba dispuesto a hacerlo.

Miró a la pareja que pasaba con envidia, se encorvó y acarició su cámara. Si las cosas seguían así, ¿cuándo podría tener una relación real como él quería?

¡Ay, qué vida tan dura!

Yu Qing Huan no era una persona amante de la diversión. Aunque hoy no tenía una parte, aún regresó al set de filmación. Inesperadamente, se encontró con Yu Xin en la puerta.

—¡Vamos, ayúdame a llevar las latas! —Yu Xin arrastró medio saco de comida enlatada, cansado como un perro muerto. En el momento en que vio a Yu Qing Huan, estrellas volaron de sus ojos.

—¡Qué alivio! —En un invierno tan frío, Yu Xin tenía la cabeza llena de sudor caliente. En el momento en que entró en la habitación de Yu Qing Huan, inmediatamente se derrumbó en el sofá.

—Amigo, gracias por tu arduo trabajo. —Yu Qing Huan le sirvió una taza de agua caliente, lo vio tragarla y se rio—: Te daré un gran sobre rojo para el Año Nuevo.

—No. —Yu Xin dejó la taza y lo miró—. ¿Te crees muy rico ahora? ¡Déjame decirte, después de comprar la casa, no te quedará nada! Incluso puede que te falte dinero para la ropa.

Con una gran suma de dinero donado sin pestañear, ¡Yu Qing Huan seguía gastando dinero como agua! ¡Lo que enojaba aún más a Xin Yu fue que era, hasta cierto punto, su cómplice!

—Necesito dormir un poco, no me molestes. —Temeroso de remover las heridas internas de Yu Qing Huan, Yu Xin dejó de hablar, empujó la puerta y entró en el dormitorio.

De hecho, incluso si Yu Xin no lo dijera, Yu Qing Huan no lo molestaría. Yu acaba de abrir la cámara que Wang Zhen Sheng le otorgó y recordó la escena de hoy en el Gran Teatro. Cuando estuvo listo para practicar de nuevo, alguien llamó a la puerta.

Temiendo de molestar a Yu Xin, Yu Qing Huan trotó para abrir la puerta antes de que pudiera apagar la cámara. Inesperadamente, era Zhao Qing Yuan.

—Finalmente estoy dispuesto a volver. —Zhao Qing Yuan dijo con frialdad esas palabras, con la barbilla levantada, como un gallo equipado con plena capacidad de lucha, entró con la cabeza en alto.

—¡Eh-hem! —Yu Qing Huan pensó en el loro al verlo y explicó con una sonrisa mientras se contenía para no reír—: Quería visitarte, pero no esperaba que vinieras ahora.

Antes de que Zhao Qing Yuan pudiera responder, Yu Qing Huan le metió en los brazos un tarro de melocotones amarillos enlatados—: Tengo una especialidad para ti. ¿Te gusta?

—¿Quieres sobornarme con una lata? —resopló Zhao Qing Yuan, hizo una pausa, miró a Yu Qing Huan y dijo con esa cara larga—: Entonces... yo... lo probaré primero. ¡Estás muerto si sabe mal!

Zhao Qing Yuan sacó un cuchillo de quien sabe dónde, abrió la lata y con entusiasmo se metió una cucharada en la boca.

El melocotón amarillo era grueso con una ligera dureza. Tomó un bocado y el jugo dulce inmediatamente sobrevoló toda la cavidad bucal. Su sabor fresco y refrescante era muy especial en invierno.

Zhao Qing Yuan originalmente quería detenerse después de comer solo un bocado, pero no podía detenerse después de comer más de la mitad. Finalmente, Yu Qing Huan, temiendo que Zhao tuviera dolor de estómago después de comer demasiada comida fría, extendió la mano y agarró directamente la lata.

—¡Déjame comer otro bocado! —Lamiendo el dulce jugo de melocotón amarillo en sus labios, Zhao Qing Yuan había olvidado su ira hace mucho tiempo. Se inclinó hacia Yu Qing Huan y dijo—: Solo un bocado más.

—Está demasiado frío para tu estómago. —Yu Qing Huan se negó, pero Zhao Qing Yuan hizo oídos sordos. Aprovechando la falta de atención de Yu Qing Huan, agarró la lata, la levantó directamente y se vertió el melocotón amarillo directo en la boca incluso sin usar una cuchara.

Yu Qing Huan lo miró, estupefacto, hasta que la otra parte se escabulló en secreto sosteniendo dos latas.

No tuvo más remedio que dejarlo ir. Aprovechó esta oportunidad para contar el número de latas y se las envió al personal del equipo de filmación como regalo.

Esa noche, Zhao Qing Yuan no resistió la tentación y comió otro melocotón amarillo enlatado. Como resultado, al día siguiente se encontró acostado en la cama con dolor de estómago, lloriqueando todo el tiempo y negándose a levantarse. Yu Qing Huan estaba enojado y casi ahogó a Zhao con medicina para el estómago.

—Me equivoqué, Qing Huan —se disculpó Zhao Qing Yuan. Aunque su voz era suave y débil, no se olvidó de sacar su teléfono móvil y actualizar su Weibo. En cuando a dejar el Internet por un día entero, había quedado olvidado hace mucho tiempo.

—Te lo mereces. Te dije que no... —Sin terminar sus palabras, Zhao Qing Yuan exclamó de repente, y luchó por saltar de la cama.

Casi asustó a Yu Qing Huan—. ¿Qué te pasa?

—¡Mira esto! —Zhao Qing Yuan, enojado, le entregó el teléfono móvil a Yu Qing Huan y maldijo enfadado—: ¡Estos malditos paparazzi! ¡Qué diablos son todos estos chismes!

Yu Qing Huan miró el teléfono móvil, ¡solo para descubrir que la escena en la que Zhao Qing Yuan entró en su habitación estaba filmada! Dado que este último no pudo ir al set de filmación debido a una enfermedad al día siguiente, la cobertura de los medios fue simplemente... maravillosa.

[Yu Qing Huan, ¡un hombre durmiendo en la cama de Zhao Qing Yuan, el ganador premio del mejor actor!]

[¡Grandes noticias! Zhao Qing Yuan se coló en la habitación de un guapo novato del mismo plató a altas horas de la noche y ni siquiera pudo salir de la cama al día siguiente.]

[Zhao Qing Yuan, el ganador del premio al mejor actor, tuvo una lesión anal, y el "criminal" resultó ser...]

[¡Conmoción! Hizo esto y aquello e hizo llorar a Zhao Qing Yuan, quien no pudo levantarse de la cama.]

—….

Yu Qing Huan se quedó totalmente sin palabras.

El lugar donde vivían ahora era un hotel de tres estrellas cerca del set de filmación. Antes de que los actores se mudaran, el equipo de filmación ya había hecho el trabajo de limpieza. Así que era muy anormal que esos paparazzi se colaran.

—¡Que se jodan esos malditos medios de comunicación! —La cara de Zhao Qing Yuan se puso roja de ira y no pudo contener su temperamento en absoluto—. ¡Deberíamos encontrar a alguien que les dé una buena lección!

Yu Qing Huan temía que perdiera el control, por lo que rápidamente lo consoló—: Está bien, mantén la calma. Le preguntaré al director Liu sobre cómo lidiar con esto.

Yu Qing Huan se volvió para irse. Mientras, la débil voz de Zhao Qing Yuan sonaba detrás de él justo cuando ganaba ritmo—. Qing Huan, incluso si realmente hiciéramos algo, deberías ser tú quien no pueda salir de la cama.

Yu Qing Huan respiró hondo, se dio la vuelta con frialdad y le lanzó una palabra a Zhao Qing Yuan—: ¡Vete!